Jade y la Amistad

Jade se encontraba sentada en el columpio del jardín. Ésta vez no se balanceaba intentando alcanzar las nubes, no, meditaba. Meditaba acerca de lo curiosas que son las amistades. Normalmente los amigos surgen por el roce, por aficiones en común y cosas similares pensaba la pequeña, pero esas aficiones varían a medida que se crece. Y ella lo estaba viviendo.

Hoy en día en el patio del recreo es dificil encontrar amigos que se conozcan desde chiquititos, al menos entre las chicas (los chicos sois unos simples). Los gustos cambian ha medida que uno crece y con ellos las amistades, supongo que es de lo más normal. No obstante existen amistades que han pasado del colegio y han llegado a los primeros años de instituto, incluso a la facultad.

Yo he crecido pensó Jade y en mi camino muchas personas, amigos, quedaron atrás. Aún así tengo amistades que creo durarán para siempre, esto aunque en ocasiones pasa no suele ser así. Tengo muy buenos amigos y los adoro a todos como si fueran parte de mi familia, de hecho a más de uno le tengo adoptado ya como hermanito o hermanita. Por las que hemos pasado juntos, que no son pocas pensó Jade recordando a Sue y ella hace unos años batallando en un piso contra un par de pijas y un ejército de hormigas. Luego recordó a Jen y a Indiana mimándola cuando estaba depre por haber roto con su novio. Y a un ser extraño pero genial llamado Merlín que se había convertido en uno de sus mejores amigos con quién le gustaba paranoiar y hacer chorradas.

Todas esas amistades se remontan a unos 4 años mas o menos, pero una de ellas es realmente una amistad muy larga. Sue y ella eran amigas desde los 5 o los 6 años, ya casi ni se acordaba de cuando se habían conocido. Ellas siempre estaban juntas, iban al cine, a divertirse, todo juntas. Jade recordó con pesar la situación actual. Ella tenía novio y Sue no. Y cada una había variado un poco sus gustos, una más hacia salir de fiesta y hacer "lo que se supone correcto para esa edad" y ella, hacía algo mas tranquilo, más intimo quizá.

Hace unos años todo era mucho más simple, iban al cine y de vez en cuando salían de marcha. Ni a Sue ni a Jade les gustaba mucho beber, a ambas les parecía una chorrada eso de darle al alcohol porque sí. Luego Sue empezó a beber más, sobre todo a partir viaje que hizo al que Jade no fue. Tampoco es que importara mucho, mientras no se pasase. Su vida es suya y que haga lo que quiera, eso era lo que siempre había pensado Jade.

Cuando entraron en la uni empezaron a salir más de marcha y esas cosas. Estaba bien, hasta ese viaje, no bebía demasiado y seguían quedando a menudo para ir al cine y hacer otras cosas. Pero desde ese viaje, quizá desde un poco antes todo empezó a cambiar. Jade, por una pequeña (vale, grande) depresión se autistó un poco bastante del mundo. No quería salir de fiesta porque estaba depre y solo iba al cine o con otros amigos a jugar al rol y hacer el mongolo, era el único plan que le apetecía. Para Sue esto no era ni mucho menos ameno, estaba ahí, pero también la apetecía ir de fiesta y se iba.

Se empezaron a dar situaciones curiosas, ella planeaba su finde y si Jade iba con ella bien, sino nada. No tenía problema, no le apetecía salir. La depre pasó y aunque salía algo más de fiesta seguía apeteciéndole más hacer el friki y cosas más tranquilas. Tampoco es que le hubiera apasionado mucho el salir. Bailar si, pero eso de los ocasionales borrachos que intentan ligar y ese tipo de cosas no le iban demasido. Jade vio grandes diferencias entre Sue y sus otros amigos. Mientras que unos me decían "ve con ella", "pasatelo bien", "ya nos vemos el finde que viene" Sue no la apoyaba tanto cuando iba con los otros. Jade se sentía culpable, era como si la abandonara, pero las cosas no eran exactamente así. Simplemente no quería ir a ese nuevo plan que a su amiga tanto le gustaba. Luego Jade encontró novio, un cielo de persona perteneciente al grupo más tranquilo con el que ella ahora prefería salir.

Ya había tenido otros novios, pero curiosamente eran de fuera y no "incordiaba" mucho en lo que era salir con Sue, pero su chico actual era de la misma cuidad y ahora Jade se veía dividida para poder quedar con los dos. No quería dejar sola a Sue, pero quería mucho a su novio, asi que se las apañaba para quedar un día con cada uno. Aunque bastantes veces si podía se iba más con el chico. Hay que poner la carne en la hoguera si uno quiere que las cosas vayan bien.

Más problemas...parecía un tira y afloja por ver con quién iba. Tal vez fueran cosas de ella, pero al haber estado siempre con Sue, le daba cosa no poder quedar tanto como siempre, aunque fuera de lo más normal. Sue por su parte no decía gran cosa al respecto, salvo algún que otro comentario acerca de que no esperaba que las cosas fueran así.

La cosa ahora era complicada. Sue se aferraba a la idea de que Jade la dejaba de lado, y se empeñaba en compararla con Angélica y su chico que al parecer no hacían lo mismo. Anque Jade no la había visto quedar ni mucho menos tanto como ella con Sue, pero bueno, son puntos de vista.

Quizá estuviera siendo egoista, pensó mientras elevaba la vista al cielo gril. No quería salir de marcha, ella también debía ceder. Pero ver a su amiga beber y luego ir a ligar no es algo muy ameno. Es decir, vale, irían al bar de turno, Sue se pediría las copas de rigor (Jade no creía que tomara nada, estaba ahorrando y seguía sin gustarle beber porque si) hasta que se pillase ese "puntillo" (según Jade, algo más) y luego irían de baretos. Con suerte Sue encontraría un chico que le gustase e iría a por el. Si fueran con mas gente Jade podría entretenerse hablando, pero ¿las dos solas? que haría, ¿admirar las pintadas de las paredes? Porque señores, estamos de exámenes, y la gente no puede salir. Y por supuesto Sue no quiere que vaya el novio de Jade porque entonces se siente como una carabina. Tampoco es que eso le importe mucho a Jade, sabe que a su chico ese plan y más por esa zona por donde le gusta salir a Sue, no le gusta.

¡Un asco! murmuró malhumorada mientras saltaba del columpio y empezaba a andar hacía la casa. Ella querría ir al cine, a cenar o a alguna otra cosa, pero Sue no quiere eso. Seguía sin saber que decirla, era su amiga desde siempre, y la adoraba; pero no le gustaba nada el camino que estaban tomando las cosas.

Ya llegando a la casa recordó con amargura que la última vez que se habían visto ella estaba enferma. Habían discutido, Sue quería que el fin de semana siguiente fueran de fiesta y ella solo había podido responder con un "me lo pensaré" El plan no le apetecía nada. Al irse, tras estar protestanto la mayor parte de la tarde sobre lo que hacía "el grupo tranquilo" solo la había dicho un "mejórate". Habían pasado varios días desde eso y ni una llamada para ver si estaba bien o no. Pero eso no era lo que la molestaba, ella tampoco era muy dada a llamar por teléfono. La molestaba el hecho de que estaba casi segura de que cuando el viernes se acercara Sue si llamaría, para recordarle ese día de marcha que tanto la apetecía.

Jade sabía sin saber que responderla, seguía pensando en ello.

Uhhmm no se si debería haber publicado esto... (se nota, que no es exactamente un cuento XD)

Por cierto mensaje subliminal.. Charly, Mary, Rachel, Draugito, Merlu, Miri (y un largo .....) os echo de menos!!!!!